(Parodia Rocker a los comicios?)
Tlalnepantla, una anotación a favor
Ayer sábado tuvimos una actuación en Tlalnepantla, mi primer actuación ahí siendo parte de "Tono 5", y confieso que mis espectativas de ello si bien no eran malas no eran precisamente pensar que era la mejor actuación, especialmente por las eventualidades que la marcaron unas horas antes de actuar. Entre algunos pequeños detalles a uno de los vehículos se le ponchó una llanta mientras ibamos al evento y la lluvia pertinaz no cesó ni siquiera mientras armábamos el escenario y a la Oly un malestar no la dejaba en paz. Ese tipo de situaciones que en un momento te hacen pensar que tal vez no será una buena noche.
Definitivamente yo ya estoy acostumbrado a lo bueno y lo malo. Alguna vez en Celaya se me cayó mi stratocaster y se dañó la pintura de un dorso y en ese mismo lugar ("El Estribo") me lié a madrazos con un pendejo borracho, en Yuriria tuve que tocar ante decenas de briagos en "Stardus" (así se llama o llamaba) que solo gustaban de música grupera y mierdas así. Incluso en Salvatierra tuve actuaciones en las que hubiera preferido quedarme en casa viendo la tele. De hecho incluso con "Tono 5" mi guitarra también ha sufrido daños precisamente por caídas pero, son gajes del oficio. Los daños se arreglan (Héctor, el bajista, es uno de los mejores lauderos de México) y las eventualidades se convierten en anécdotas y experiencia incluso muy divertidas algunas (como cuando uno de nosotros se equivoca en determinada canción y a los demás les ponemos a parir chayotes). La cosa es que tocando la música que sea siempre habrá buenos y malos ratos.
Pero la noche de ayer, de hecho creo que fue una de las noches más mágicas que hemos tenido y en el momento en que parecía ser más opaco todo fue que se derribaron las murallas, de la misma manera en que el Rock and Roll siempre consigue hacerlo. Justo en el momento en que la lluvia amenazaba con estropearlo de manera definitiva fue precisamente su presencia la que unió a la gente a la que les gustamos.
Me alegro de la noche de ayer, me alegro de "Tono 5" porque es del tipo de bandas que saben salir avantes y me alegro de haber tocado ante el público que tocamos. Fue, para mi gusto, una gran noche sin parodiar al gachupín loco ese que se siente divo de Linares. Gracias compañeros de "Tono 5", gracias a la gente que ayer lo hizo posible.
Es cuanto
Messy Blues
Ayer sábado tuvimos una actuación en Tlalnepantla, mi primer actuación ahí siendo parte de "Tono 5", y confieso que mis espectativas de ello si bien no eran malas no eran precisamente pensar que era la mejor actuación, especialmente por las eventualidades que la marcaron unas horas antes de actuar. Entre algunos pequeños detalles a uno de los vehículos se le ponchó una llanta mientras ibamos al evento y la lluvia pertinaz no cesó ni siquiera mientras armábamos el escenario y a la Oly un malestar no la dejaba en paz. Ese tipo de situaciones que en un momento te hacen pensar que tal vez no será una buena noche.
Definitivamente yo ya estoy acostumbrado a lo bueno y lo malo. Alguna vez en Celaya se me cayó mi stratocaster y se dañó la pintura de un dorso y en ese mismo lugar ("El Estribo") me lié a madrazos con un pendejo borracho, en Yuriria tuve que tocar ante decenas de briagos en "Stardus" (así se llama o llamaba) que solo gustaban de música grupera y mierdas así. Incluso en Salvatierra tuve actuaciones en las que hubiera preferido quedarme en casa viendo la tele. De hecho incluso con "Tono 5" mi guitarra también ha sufrido daños precisamente por caídas pero, son gajes del oficio. Los daños se arreglan (Héctor, el bajista, es uno de los mejores lauderos de México) y las eventualidades se convierten en anécdotas y experiencia incluso muy divertidas algunas (como cuando uno de nosotros se equivoca en determinada canción y a los demás les ponemos a parir chayotes). La cosa es que tocando la música que sea siempre habrá buenos y malos ratos.
Pero la noche de ayer, de hecho creo que fue una de las noches más mágicas que hemos tenido y en el momento en que parecía ser más opaco todo fue que se derribaron las murallas, de la misma manera en que el Rock and Roll siempre consigue hacerlo. Justo en el momento en que la lluvia amenazaba con estropearlo de manera definitiva fue precisamente su presencia la que unió a la gente a la que les gustamos.
Me alegro de la noche de ayer, me alegro de "Tono 5" porque es del tipo de bandas que saben salir avantes y me alegro de haber tocado ante el público que tocamos. Fue, para mi gusto, una gran noche sin parodiar al gachupín loco ese que se siente divo de Linares. Gracias compañeros de "Tono 5", gracias a la gente que ayer lo hizo posible.
Es cuanto
Messy Blues
No hay comentarios:
Publicar un comentario